Anoche, mientras estaba en el concierto, se me ocurrieron un montón de formas ingeniosas de comenzar esta crónica. Pero tras el final apoteósico llegué a una conclusión; chorradas las justas. Ese debe ser el lema de los neoyorquinos, porque no se anduvieron con tonterias. Directos a la yugular.
Tras la descarga ruidosa de los madrileños AU, que parecieron gustarse en el escenario, llevando la disonancia mas allá de lo que nos tienen acostumbrados Sonic Youth, estos, aparecieron puntuales, es decir, a la hora ¡exacta! lo que siempre es de agradecer y fueron recibidos con mucho calor por parte del público madrileño.
Ahora me doy cuenta de que quizas haya tenido la suerte de ver (junto con el de Barcelona del día 18) un concierto atípico dentro de la gira, ya que Sonic Youth suelen tocar su último disco entero, en este caso The Eternal. Pero en esta ocasión desplegaron un concierto de "clásicos". Es decir, ni un solo tema de los conocidos por todo el mundo (no sonaron "Sugar Kane", ni "Teenage Riot"), pero un gran número de concesiones a los fans.
Eso nos decía Kim Gordon al comenzar el concierto "Mañana podeis volver porque tocaremos The Eternal"... Probablemente la ausencia del bajista de estudio de su última entrega, Mark Ibold de Pavement, por motivos profesionales (Pavement tocaban en Chicago), ha propiciado este setlist clásico.
Empezaron con Schizophrenia, impecables de sonido pero un poco bajos, y ya supimos qué tipo de concierto íbamos a ver, Bull in the heather, Hey Joni, Shadow of a doubt, 100%, Stereo Sanctity, Skip Tracer, Silver Rocket, The Sprawl..
Es sobradamente conocida la pasión de estos chicos por las guitarras, y tanto Thurston Moore como Lee Ranaldo utilizaron tantas guitarras como canciones sonaron, pero no era una mera exhibición. La variedad de sonidos que abarca Sonic Youth a lo largo de su discografía se ve reflejada en esas guitarras tipo explorer de sonidos cerrados y metaleros, las Gibson rockeras que dan tanto brillo, por no hablar de todas las guitarras construidas ex-profeso para obtener determinados sonidos, puentes flotantes, con doce cuerdas, con mastiles inverosímiles, afinaciones alternativas, etc.
Si sumamos el uso de diversas distorsiones, ecos y el uso de loops para crear estructuras repetitivas y drones empezamos a hacernos cargo de lo que esta gente entiende por noise.
Así acabaron la primera parte del concierto con un salvaje Death Valley 69 en el que el volumen ya había subido sensiblemente.
Abandonaron el escenario hasta tres veces para ofrecer otros tantos bises; para el primero sonó Expressway to yr skull y Cross´the breeze que es habitual en el setlist desde que hicieron la gira del veinte aniversario de Daydream Nation, del que también rescataron las dos primeras partes de la "trilogia" para el segundo bis.
Con el público ya entregado a fondo volvieron a aparecer en escena para regalarnos una de esas sesiones de ruido y drones que tan bien manejan hasta hipnotizar por completo a toda la sala (y no es un decir...).
Están en perfect forma y he de decir que hay temas que suenan mejor todavía que en disco, adquiriendo más matices dentro de todo el envoltorio sonoro que llevan.
Tras 1 hora y tres cuartos abandonaban el escenario dejando al público con una gran sonrisa en la cara. El viaje sónico había acabado...
Para mas información:
Página web se Sonic Youth
Texto: Dr Jarri
Fotos: Dr Jarri
2 comentarios:
Gran concienrto de Sonic Youth, también estube allí, fue glorioso, además hacia mucho tiempo que sonaban en directo tan magnificos
lo mejor, Sonic Youth versionando a Sonic Youth....impresionante....
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