23 abril 2010

Arroz con Habichuelas (Mi abuela)

Los caminos de Mordor son inescrutables y transcurren por extraños vericuetos, como decía Victor Warcry.
Así llegó a mis oidos de nuevo este tema y surgió un imparable sentimiento de nostalgia que tenía que desembocar en algún lado, o sea, aquí.

Corría el año 1989 y  los chavales de mi edad empezábamos a tener el oido hecho al rap en castellano, gracias a aquellos hits del hip-hop primitivo cuyo máximo exponente fue el "Hey pijo" de Mc Randy y Dj Jonco. Que curiosamente nos influyó antes de que hubieramos oido hablar de Gil Scott-HeronAfrika Bambaataa, Kool Herc, Grandmaster Flash o Public Enemy.


Pues en eso estábamos cuando la llegada del verano y los interminables días de hacer y deshacer por las calles del barrio nos trajeron un nuevo himno, comercial si, pero en aquella época nos daba lo mismo.
Una canción tremendamente pegadiza y rapeada en un lenguaje que la hacía aun mas exótica. Expresiones como "vaya vaina" y "que chavienda" aun no habían llegado a Madrid con los inmigrantes de la zona caribeña ni los todopoderosos "culebrones" venezolanos.
Además hacía gala de una producción ciertamente cañera y con influencias negras y latinas a la par. Por supuesto todo esto en aquella época nos daba absolutamente igual. Solo cantábamos sin parar "Mi abuela" y con mas sorna si te encontrabas en presencia de la tuya.



El tema en cuestión surgió de la mente de Wilfred Morales, un cómico puertorriqueño que, en un intento de parodia de lo que despues se daría en llamar "la época dorada del rap caribeño", pasó directamente a formar parte de el, junto a aquellos pioneros que traian directamente de Nueva York los sonidos del Hip-Hop como Gerardo (Mejia de Ecuador) y su “Rico Suave” o Que Pasa y su “Mami Yo te Quiero”.



Este primer sencillo venía acompañado en su cara B de "La baticueva" otra parodia de un posible amor entre Batman y Robin (ejem) que no llegó a cuajar, al igual que posteriores intentos de éxito como "Amor Antes Que Conveniencia", "Gente Como Tu" y "Ya Sobran Bocas". Tras esto Wilfred abandonó el mundo de la música para centrarse en su carrera televisiva en la que logró alguna notoriedad. Pero el mal ya estaba hecho. Miles de chavales hispanohablantes en el mundo competían por ver quien era capaz de recitar de memoria mas fraseados y con mejor "estilo". El rap en catellano estaba en tu barrio o en tu pueblo.



Por otra parte y escuchando ahora el tema no puedo evitar las comparaciones con lo que al año siguiente sería el nuevo desafio de la chavalería. Recitar de corrido la versión en castellano del rap de la intro de la serie televisiva "El Principe de Bel-Air" que como podeis comprobar tenía bastantes similitudes con la historia contada por Wilfred.





Me ha sorprendido descubrir que Will Smith accedió a protagonizar esta serie porque era la única salida que le quedaba para pagar los 2,8 millones de dolares que debia al I.R.S. americano tras dilapidar la fortuna que hizo como rapero durante los años 80. Quien le iba a decir que acabaría haciendo Men in Black...

Así, siguiendo los cánones estéticos de los negros (o como dicen en Norteamérica, afroamericanos...) de las teleseries nos llegó el rap en imágenes; los cortes de pelo, la ropa ancha y colorida y la forma de andar. Cuantas camisetas y bermudas de inexplicables colores chillones habremos llevado por su culpa.

Después vendrian Sindicato del Crimen y El Club de los Poetas Violentos y su "Madrid Zona Bruta", pero eso ya es otra historia...

Dr. Jarri

1 comentario:

Anónimo dijo...

Desde tàn lejos; leer y escuchar esto es como volver a estar en casa!!! Bueno, con unas canciones màs qeu otras.
Muchas gracias
Unbeso