¡Estamos de enhorabuena, las Bestias han regresado! La enésima formación de The Beasts of Bourbon, una de las bandas más interesantes del rock australiano, reaparece con el flamante Little Animals y con gira española que les traerá a Madrid en breve.
Llevábamos tiempo sin escuchar nada nuevo de los australianos desde que apareció Low Life en 2005. Entonces Tex Perkins (voz) prometió que habría material nuevo de estudio: «somos muy vagos. Lo haremos pronto... tal vez». Si a eso le sumamos que algunos miembros han continuado con otros proyectos (The Surrealists, The Voyeurs, ...) y con sus sólidas carreras en solitario (Brian 'Henry' Hooper, Spencer P. Jones y el propio Perkins) tenemos el retraso garantizado. Así, hasta 2007 no apareció lo nuevo de las Bestias: Little Animals. Un disco grabado y mezclado en tres días, donde los Bourbon vuelven más macarras que nunca.
El sonido es el habitual, rock pesado de guitarras efectivas y sin florituras, con una base rítmica apabullante (aunque el bajo está en un discreto segundo plano) y la expresiva voz de Perkins en primer plano; a veces cascada («Sleepwalker») , a veces melodiosa («Little animals»), o las dos cosas a la vez, como en «New day of the dead» donde al forzar el tono le sale más rota al terminar los versos. Mezclado con algo de hard rock setentero, ecos de garage-rock («Too much too late» podría encajar en cualquiera de los dos últimos trabajos de The Dirtbombs) y, por supuesto, ese blues-rock pantanoso que tanto ha gustado en Australia y que las Bestias convirtieron en marca de fábrica con sus primeros álbumes. Mucho rock potente combinado con temas más tranquis; unos más melancólicos («Little animals»), otros más sombríos («New day of the dead») , todos preciosos.
Entre los temas a destacar (cuesta no hacerlo con todos, el álbum es redondo) nos encontramos primero con la cínica «I don't care about nothing», un rock poderoso que abre el álbum y da paso a dos cortes que funcionan de antesala para la tremenda «Master & slave», un medio tiempo que aborda el siempre escabroso tema de la dominación sexual y el sadomasoquismo. La cara A concluye con la excelente «Little animals», un triste canto por la desaparición de los animalitos causada por el hombre (¿tendrá una doble lectura? ¿Será una ironía o nos la tomamos en plan literal?). La cara B arranca prometedora con «The beast I came to be», una de las canciones más salvajes con una batería vertiginosa y con distorsión guitarrera, que da paso a «Sleepwalker», un blues sucio marca de la casa y otro de los mejores temas del disco. Otras dos canciones dan paso a una macarrada como «Thanks», una oración en la que dan gracias al ¿Señor? por todo lo bueno que nos ha dado: cerveza, whisky, marihuana, ácido, éxtasis, heroína... Si es que siempre han sido unos yonquis.
Little Animals es, como ya he dicho, un álbum redondo que no se ha visto perjudicado a nivel compositivo ni por los más de diez años que separan a éste del anterior trabajo de estudio de las Bestias ni por los numerosos proyectos paralelos y carreras en solitario de sus cinco miembros. Por no hablar del aire que se dan entre ellos para olvidar las rencillas y animosidades que, desgraciadamente, se dan entre sus componentes.
El álbum apareció en España de la mano de Bang! Records (uno de esos sellos agrupados en torno a Munster) a finales del pasado año. A principios de este año, con las copias agotadas, apareció una nueva edición especial limitada (1000 copias) con portada en blanco (en vez de la original en negro) y en relieve y carpeta abierta.
Y coincidiendo con el lanzamiento de esta nueva edición, The Beasts of Bourbon vuelven a visitar los escenarios españoles con una gira que les traerá el día 4 de abril a Madrid, a la Sala El Sol acompañados por los excelentes The Soulbreaker Company, excelente grupo de southern-rock de Gasteiz. Si no eres de Madrid estate atento a las otras fechas:
El sonido es el habitual, rock pesado de guitarras efectivas y sin florituras, con una base rítmica apabullante (aunque el bajo está en un discreto segundo plano) y la expresiva voz de Perkins en primer plano; a veces cascada («Sleepwalker») , a veces melodiosa («Little animals»), o las dos cosas a la vez, como en «New day of the dead» donde al forzar el tono le sale más rota al terminar los versos. Mezclado con algo de hard rock setentero, ecos de garage-rock («Too much too late» podría encajar en cualquiera de los dos últimos trabajos de The Dirtbombs) y, por supuesto, ese blues-rock pantanoso que tanto ha gustado en Australia y que las Bestias convirtieron en marca de fábrica con sus primeros álbumes. Mucho rock potente combinado con temas más tranquis; unos más melancólicos («Little animals»), otros más sombríos («New day of the dead») , todos preciosos.
Las Bestias del Bourbon en 2007: de izquierda a derecha Spender P. Jones (guitarra), Brian Hooper (bajo), Tex Perkins (voz), Charlie Owen (guitarra) y Tony Pola (batería)
Entre los temas a destacar (cuesta no hacerlo con todos, el álbum es redondo) nos encontramos primero con la cínica «I don't care about nothing», un rock poderoso que abre el álbum y da paso a dos cortes que funcionan de antesala para la tremenda «Master & slave», un medio tiempo que aborda el siempre escabroso tema de la dominación sexual y el sadomasoquismo. La cara A concluye con la excelente «Little animals», un triste canto por la desaparición de los animalitos causada por el hombre (¿tendrá una doble lectura? ¿Será una ironía o nos la tomamos en plan literal?). La cara B arranca prometedora con «The beast I came to be», una de las canciones más salvajes con una batería vertiginosa y con distorsión guitarrera, que da paso a «Sleepwalker», un blues sucio marca de la casa y otro de los mejores temas del disco. Otras dos canciones dan paso a una macarrada como «Thanks», una oración en la que dan gracias al ¿Señor? por todo lo bueno que nos ha dado: cerveza, whisky, marihuana, ácido, éxtasis, heroína... Si es que siempre han sido unos yonquis.
Little Animals es, como ya he dicho, un álbum redondo que no se ha visto perjudicado a nivel compositivo ni por los más de diez años que separan a éste del anterior trabajo de estudio de las Bestias ni por los numerosos proyectos paralelos y carreras en solitario de sus cinco miembros. Por no hablar del aire que se dan entre ellos para olvidar las rencillas y animosidades que, desgraciadamente, se dan entre sus componentes.
El álbum apareció en España de la mano de Bang! Records (uno de esos sellos agrupados en torno a Munster) a finales del pasado año. A principios de este año, con las copias agotadas, apareció una nueva edición especial limitada (1000 copias) con portada en blanco (en vez de la original en negro) y en relieve y carpeta abierta.
Y coincidiendo con el lanzamiento de esta nueva edición, The Beasts of Bourbon vuelven a visitar los escenarios españoles con una gira que les traerá el día 4 de abril a Madrid, a la Sala El Sol acompañados por los excelentes The Soulbreaker Company, excelente grupo de southern-rock de Gasteiz. Si no eres de Madrid estate atento a las otras fechas:
Miercoles 2, Mallorca (Teatre Lloseta)
Jueves 3, Barcelona (Sidecar)
Viernes 4, Madrid (El Sol)
Sabado 5 Bilbao (Kafe Antzokia)
Domingo 6, Castellon (Auditorio Ciclo Ricoamor)
Joven Frodo
Enlaces de interés:Beasts of Bourbon | myspace
Tex Perkins | página web | myspace
Spencer P. Jones | página web| myspace
Brian Hooper | página web | myspace
The Soulbreaker Company | página web | myspace
Bang! Records | página web | myspace
Tex Perkins | página web | myspace
Spencer P. Jones | página web| myspace
Brian Hooper | página web | myspace
The Soulbreaker Company | página web | myspace
Bang! Records | página web | myspace
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