Estos 4 chicos de Barcelona volvieron para darnos una leccion de rock en sus dos únicos conciertos programados, uno en Barcelona y el otro en Madrid.

Sonaron todos sus clásicos, desde Daydream a Crying shoes. Comenzaron muy fuerte con Rest y ya no bajaron la intensidad, incluso en canciones más lentas como I´m the fuel, la fuerza desgarradora con la que la interpretaron, hizo que no bajasen ni un pelo el concierto.

Una pena que no tengan previsto continuar, pero es lo que tiene el mundo de los grupos, cuando se acaba, mejor dejarlo, que estropearlo. Nos dejaron con muy buen sabor de boca!!
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